Muchas personas, al pensar en un detective privado, tienen en mente la imagen que han dado de estos profesionales el cine y las novelas.
Pero la típica imagen de un detective privado con un revólver en la chaqueta, bebiendo whisky rodeado de pruebas o consumiendo un cigarro mientras examina un cadáver están muy lejos de la realidad.
En el artículo de hoy, vamos a analizar cuáles son los peligros reales de ser detective privado en nuestro país. ¿Estás preparado para descubrir la realidad detrás del sombrero de Sherlock?
¿Cuáles son los peligros a los que se enfrenta un detective privado?
La información que vamos a compartir, está basada en las experiencias de nuestros detectives y compañeros de profesión.
Gracias a la larga trayectoria de nuestra agencia de detectives privados, hemos cubierto todo tipo de servicios y hemos vivido un sinfín de experiencias.
No investigamos delitos
Uno de los principales errores de personas con poco conocimiento de la profesión es pensar que, como no investigamos delitos, no nos encontramos en situaciones de peligro.
Este error está basado en la premisa de confundir al individuo con sus actos. No se puede equiparar al delito con el delincuente. Existen muchos otros matices y características que influyen en la ecuación.
Aunque el motivo por el que se investiga a un individuo pueda parecer “de poca monta”, como una infidelidad, una baja fingida o no pasar la pensión alimenticia, la realidad es que el individuo puede ser mucho más que “solo” un infiel, un estafador o un irresponsable.
Son muchos los casos en los que, durante una investigación rutinaria, nos encontramos ante narcotraficantes, delincuentes con antecedentes criminales o, simplemente, personas violentas.
En muchas ocasiones, acabamos teniendo que trabajar en sitios peligrosos, donde la gente solo acude a comprar y vender estupefacientes y otras sustancias ilegales.
El acudir a lugares de este estilo supone un verdadero riesgo, ya que a la gente que está haciendo negocios ilegales no les hace ninguna gracia que haya un detective privado investigando por la zona. Y, como están fuera de la ley, suelen tener maneras de proceder poco honrosas y muy peligrosas.
¿Los detectives privados llevan armas?
Como mencionamos en la introducción, la imagen del detective privado de las series y los relatos escritos está muy alejada de la realidad de un detective privado en nuestro país.
Y, como hemos visto, aunque no nos exponemos a los mismos peligros que esos personajes de ficción, sí que muchas veces nos encontramos ante situaciones complicadas y peligrosas.
Es por esos peligros, que muchas personas piensan que los detectives privados tenemos licencia de armas. Esto es un craso error.
Es cierto que, en la carrera para ser detective privado, se reciben instrucción sobre el tema de las armas. Pero los detectives privados no tienen licencia para llevar un arma. Por lo tanto, no podemos estar más armados que cualquier otro civil de a pie.
Los investigadores privados solo contamos con una licencia especial que nos identifica como investigadores privados y nos permite realizar algunas acciones que solo están reservadas para los profesionales acreditados con una TIP.
Esperamos que ahora puedas comprender más en profundidad cuáles son los peligros a los que nos exponemos los detectives privados. Recuerda que, si necesitas investigar algún asunto, puedes contar con la experiencia de nuestra agencia de detectives privados.